Guion vídeo institucional. Qué y por qué realizar vídeos institucionales
Sea cuál sea tu sector económico actual resulta indispensable lograr ser diferente de los demás competidores, y que grabar un vídeo institucional será una manera ideal de lograrlo. Mediante la expansión de Internet la forma de comerciar ha cambiado, hoy día es necesario una manera imaginativa de destacar el papel de tu empresa por encima de la competencia.
Podemos citar cientos de maneras de grabas un vídeo institucional, sin embargo antes de conocer qué se necesita para que un vídeo tenga éxito, tenemos que tener claro qué es este tipo de vídeo.
Guion vídeo institucional. ¿Qué es un vídeo institucional?
Un vídeo institucional es el que cuenta con la capacidad de exponer los valores, la visión, las metas y labores de la institución. Su misión esencial es explicar y enseñar en qué y cómo trabaja la organización.
A fin de cuentas tu vídeo institucional representará a tu marca, y lo experto que eres, y se utilizase usa tanto para mostrarlo a quién ya conoce tu institución, como a nuevos espectadores.
El lugar ideal para colocar tu vídeo institucional es en tu página online, el canal corporativode YouTube o perfil de Linkedin, aunque también puede ser compartido en los medios sociales. Ten en cuenta que el objetivo final es llegar a cuantas más personas, mejor.
Guion vídeo institucional. ¿Cómo se lleva a cabo un vídeo institucional?
Tener un vídeo institucional bien hecho es fundamental, por eso mismo queremos explicarte los diferentes aspectos que se necesitan tener presente al grabar uno:
- Identificar al público objetivo: El primer paso es precisar quién va a ser el público objetivo o target para quien va dirigido el vídeo, con el fin de poder adaptar el mensaje y el tono visual. No todo el mundo es igual, todos tienen sus gustos y preferencias particulares, y es esencial saber cuáles son.
- Causar sentimientos: El error más común de los vídeos institucionales es el tedio. Procura no usar mensajes monótonos que únicamente hablen del producto o servicio o de la organización. Es mejor contar una historia mediante imágenes y apela a las emociones de la gente, con ello les resultará más fácil recordar lo que haces.
- Originalidad: Anteriormente ya lo hemos mencionado, el mercado está lleno de competidores por lo que es necesario tratar de destacar. Para poder lograrlo se necesita creatividad y originalidad para explicar los puntos fuertes del negocio.
- Hablarle al cliente, no a la institución: Al se graba un vídeo institucional a veces se cae en el fallo de perder de vista al cliente. Sí, se está intentando presentar el negocio, pero no es necesario agobiar a la audiencia con datos y gráficos complicados. Proporcionar un toque más humano al mensaje, es la solución.
- Ser conciso: En esta época tecnológica cobra más importancia que nunca que “lo bueno si breve, dos veces bueno”. La audiencia no quiere ver largos vídeos elogiándote a ti mismo, procura que dure entre un minuto y medio o dos.
- Calidad: La calidad de imagen del vídeo está vinculada de modo directo con la impresión de la marca, préstale atención. Incrementa el interés que creas escogiendo un formato que se pueda apreciar en el máximo número de formatos posible.
- Compartir: No limites el vídeo en tu página web. Saca partido a que en la actualidad se comparte todo por las redes sociales, y esfuérzate por que tu producto audiovisual también aparezca en las plataformas como Facebook o Instagram.
Guion vídeo institucional. Ventajas de los vídeos institucionales
Sin embargo se incrementen las ganancias es únicamente el resultado, hacer un vídeo institucional posee otras ventajas:
- Lograr diferenciarse: No nos cansaremos de decirlo y, lo volveremos a repetir tantas veces que haga falta: un vídeo corporativo bien hecho es la mejor forma de conseguir destacar entre los demás competidores del sector. A la vez que vas a realzar tus valores, enseña tus puntos fuertes junto con eso que te haga único.
- Impulsar la comprensión: El formato audiovisual hace más fácil el entendimiento y la comprensión de lo que se quiere comunicar. Es más, nos servimos de conocimientos publicitarios para grabar vídeos institucionales que transmitan tu mensaje, de forma nítida y concreta.
- Crear curiosidad: Subir un vídeo institucional en tu sitio web o en alguna plataforma social aumentará la respuesta de los usuarios. Lo que esto quiere decir, es que un vídeo crea curiosidad entre los visitantes, que pasarán más tiempo en la web, para conocer más y mejor a la marca.
- Generar confianza: Si te visibilizas como eres verdaderamente, con total transparencia y cercanía puedes generar confianza entre tus espectadores. Hoy por hoy la gente no compra productos o servicios, sino marcas, por este motivo les gusta saber toda la información que hay detrás de tu fachada.
- Crear repercusión: El formato de vídeo posee además una ventaja inherente: crea una repercusión visual. En ocasiones basta solo con un fotograma o con un segundo para se nos recuerde para siempre. Hay que intentar grabar un vídeo que llame la atención de la audiencia.
- Comunicarse por imágenes: Como dice el popular refrán: “una imagen vale más que mil palabras”. Y no es mentira. Las imágenes, apoyadas por el sonido resultan más explicativas que todo escrito que puedas hacer.
- Amortiza la inversión: Elaborar un vídeo institucional es una inversión muy lucrativa. Usando poca cantidad de dinero puedes obtener un producto audiovisual que fideliza a tus usuarios, y mientras además atraerá a nuevos usuarios. Y todo ello solamente aumenta tus beneficios.
Guion vídeo institucional. Tipos de vídeos institucionales
El vídeo institucional se centra en un propósito definido, y dependiendo de cuál sea este se pueden distinguir diversos tipos de vídeos.
Para empezar, y según el público objetivo, podemos encontrar:
- vídeos para visionado interno: son aquellos destinados a ser vistos por el propio personal de la institución, como pueden ser los empleados o los asociados, no obstante también se incluye a distribuidores o proveedores.
- vídeos para visionado externo: son los hechos para los diferentes consumidores de la organización, esto es, los que ya son clientes que son fieles a la marca, pero también aquellas personas que son clientes potenciales y pueden convertirse en fieles.
Pero además, existe una distinción técnica que clasifica los productos audiovisuales institucionales de la siguiente forma:
- vídeos de marca: Estos son los vídeos normales que se pueden ver en redes corporativas, y que normalmente presenta los ideales que identifican a la organización: sus inicios e historia, sus ideales y valores, y sus tareas. Recomendamos hacer un vídeo más bien corto pero que se quede en la memoria, es decir, que será sencillo recordarlo.
- vídeos para exposiciones: Se trata de vídeos promocionales, que sirven para presentar la organización a la audiencia en un ámbito concreto, como por ejemplo en una convención, en una reunión, o cualquier otra clase de acontecimiento. También se puede utilizar para destacar en del sector en el que se desarrolle la actividad.
- vídeos para el social media: Estos vídeos son aquellos que se diseñan para las redes sociales. Ya que existe inmensa cantidad de productos audiovisuales de estas plataformas, hay que hacer un vídeo de la mejor calidad que llame la atención de la audiencia, por encima de los competidores.
- vídeo para enviar por el email: Está comprobado que añadir un archivo de vídeo en los correos corporativos, incrementa exponencialmente la tasa de apertura de dichos emails. Incluye vídeos institucionales referentes a servicios y productos nuevos en tus emails, cada vez que los necesites presentar.
- vídeos de testimonios: Hay estudios que confirman que los usuarios se fían en las opiniones de otras personas, cuando van a adquirir un servicio. Usa esa fiabilidad para realizar vídeos institucionales de buenas declaraciones de usuarios habituales.
- vídeos de las preguntas más frecuentes: Casi todas las páginas online de instituciones poseen un anexo con las contestaciones a las preguntas más habituales. Existe la posibilidad de hacer tu apartado de FAQ resulte más dinámica y atractiva ofreciendo este contenido en formato audiovisual.
- vídeos de demostración: Por norma general se suelen describir la información de los productos o servicios por escrito, lo que es muy práctico. No obstante es mucho mejor completarlas mediante una descripción audiovisual o con un vídeo tutorial, que van a ser mucho más demostrativos y entendibles.