▷Todo lo que se necesita para realizar un espectáculo con drones y luces

El espectáculo de luces con drones se ha convertido en un nuevo método de entretenimiento que fusiona el arte y la tecnología y en donde es posible conseguir unos resultados especialmente llamativos. Una institución, una empresa o un profesional tienen la posibilidad de deleitar a su público a través de esta experiencia innovadora. De hecho cada vez tienen más presencia en distintas clases de eventos empresariales, culturales, aniversarios, bodas, fiestas tradicionales, actos institucionales o presentaciones de marcas.

Ejemplo de vídeo con drones

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Estas exhibiciones aéreas tienen la capacidad de mezclar la creatividad del diseño para formar figuras 3D con la precisión de la ingeniería. Esto se traduce en un espectáculo de primer nivel que difícilmente podrán borrar de sus cabezas los presentes.

Pero como es lógico, detrás de una exhibición de estas características se esconde un laborioso trabajo en donde confluyen una serie de elementos, que van desde un software avanzado, un hardware especializado, logística o unos protocolos de seguridad que garantizarán que todo salga a la perfección.

Un ejemplo de lo que se puede conseguir con uno espectáculo de luces con drones se pudo vivir el pasado verano en las fiestas de la Mercè en Barcelona. Para llevarlo a cabo se precisaron básicamente de tres puntos esenciales.

Drones: se emplean drones ligeros y resistentes pensados para portar luces LED de alta intensidad.
Luces LED: las luces son programables individualmente para enseñar distintos patrones y colores.
Estación de control: un equipo informático y de transmisores contribuirán al control de los drones en tiempo real. Este último apartado merece una especial atención, ya que sin él sería prácticamente imposible sacar adelante la exhibición. Se ocupa de la gestión y supervisión de los distintos detalles que integran el espectáculo.

Estación de control

La parte más técnica y compleja de este proceso se encuentra en la estación de control. Está compuesto por los siguientes elementos.

Computadoras de alto rendimiento: consisten en equipos con capacidades de procesamientos muy altos, preparados para desarrollar el software de control y simulación.
Transmisiones y receptores: las señales que se envían y reciben desde los drones son posible gracias a los equipos de radiofrecuencia.
Pantallas de monitoreo: a través de ellas se podrá ver el estado y la posición de los drones en tiempo real.

Entre las funciones que desempeña esta estación se encuentran el registro de datos, la planificación y programación, la sincronización, la comunicación en tiempo real, el monitoreo y la intervención manual.

En este sentido, hay que decir que resulta especialmente importante que haya una gran seguridad. De ahí que las comunicaciones entre los drones y la estación de control permanezcan encriptadas para que no se vean alteradas por posibles interferencias malintencionadas. Además, es preciso que tenga unos sistemas de apoyo capaces de asegurar su adecuado funcionamiento si se diera algún tipo de contratiempo.

El centro de control es probablemente el punto más importante para el manejo de los drones. Exige que haya unos protocolos de seguridad fuertes, además de hardware y software avanzados.

La trascendencia del software

Para que este espectáculo de luces con drones salga a la perfección también se requiere de una serie de programas. Y entre los tres tipos de software que se integran en el proyecto están los siguientes:

Simulación: previo al vuelo real sobre el cielo nocturno se efectuará una simulación en software para visualizar la exhibición.
Programación de vuelo: los vuelos de los drones se programan teniendo en cuenta aspectos como el viento y la duración de las baterías.
Sincronización: el software garantiza la sincronización perfecta de los drones para que puedan crear las figuras sobre el cielo.

El papel de la logística y la seguridad

Un espectáculo de drones exige el cumplimiento de una serie de normas. Entre otras cosas, para volar en un espacio aéreo se necesita contar con unos permisos, además de determinar un área segura para que estos aparatos puedan despegar y aterrizar sin contratiempos. Al tiempo que se celebra la exhibición, un equipo monitorea el estado de los drones para que todo se ajuste a lo previsto.

Los drones seguirán en todo momento las rutas programadas y se desplazarán por el espacio aéreo preciso para que se puedan formar las figuras. De la misma manera, también se irán encendiendo y cambiando de color con intención de componer los diseños visuales. Al finalizar el espectáculo, estos dispositivos volverán al lugar de aterrizaje.

Este trabajo precisa de una gran precisión para que las formas en 3D se puedan crear de manera adecuada, al tiempo que se garantiza la seguridad tanto de los asistentes como de los propios drones.