Costo de edición de vídeo – Importancia de la edición de vídeos profesional
Hoy nos movemos en un mundo donde rige el contenido gráfico, ya sea en fotos o con soporte de audio en forma de vídeos. A decir verdad, la mayoría nuestras formas de entretenernos están relacionadas con ellos: noches enteras viendo películas en Netflix, ir con la familia al cine, buscar inspiración en Instagram o Pinterest, o intercambiar esos tiktoks tan divertidos con tus familiares, nos divierte bastantes horas a lo largo de la semana.
Sin embargo no solamente el ocio está lleno de vídeos e imágenes: los spots publicitarios, los vídeos de las webs de empresas, las opiniones de productos, y mucho más, necesita de cierta calidad, que grabando con el móvil no se obtiene. Si quieres conseguir el mejor vídeo para promocionar tu producto o tu compañía necesitas que esté ejecutado correctamente, lo cual se logra a través de la edición de vídeos profesional.
¿Qué se entiende por edición de vídeos profesional?
Editar una grabación supone crear un proyecto audiovisual optando por las mejores grabaciones, sonido, melodías y otros elementos, modificándolos y juntándolos siguiendo como guía que quiere el autor.
Es un trámite fundamental en la etapa de postproducción, puesto que la edición es la que consigue organizar todo el material que se ha podido recopilar cuando se ha grabado, sirviéndose de imágenes de archivos, fotografías, animaciones y muchos elementos más.
¿Para qué sirve la edición profesional de vídeos?
El cometido del editor es conseguir que el vídeo resulte como la mejor versión, adornándolo y resaltando cada punto diferenciador. Esto se puede conseguir mediante técnicas de edición y montaje, que dan como resultado un vídeo estructurado, correcto y con los efectos y la calidad apropiada.
Editar es complicado, de manera que cuando quieras recibir un vídeo de calidad, lo mejor es contratar un profesional. Este profesional se ocupará de todas y cada una de las labores de edición, que comprenden:
- Cambiar lo que dura el vídeo.
- Combinar distintas grabaciones.
- Transformar la resolución o el formato.
- Introducir imágenes, dibujos, gráficos o diseños.
- Poner títulos y subtítulos.
- Incrementar la calidad de la imagen.
- Incorporar efectos en la edición.
- Añadir o modificar el audio, efectos de sonido y música.
Ya has podido ver que el montaje y la edición en un vídeo es básica si quieres conseguir un producto audiovisual que sea capaz de contar una historia ordenada y coherente. No solo es juntar cronológicamente las imágenes, la edición además aporta un valor incalculable.
Recuerda que una mala edición será capaz de echar al traste un buen guion y unas grabaciones increíbles, y viceversa, la excelente tarea del editor profesional puede incluso mejorar una idea mediocre o imágenes de no muy buena calidad.