Los vídeos promocionales son una magnífica herramienta para publicitar y comercializar productos y servicios, pero también cada vez más para involucrar a los participantes y asistentes a un evento, ayudando a aumentar la visibilidad e incluso la asistencia.
Los eventos son una buena manera de generar contenidos entre expositores, participantes, asistentes y conferenciantes satisfechos de eventos que se han celebrado con anterioridad, pudiendo incluir su email para recibir promociones en eventos que tengan lugar en el futuro. Por esta razón, los eventos en streaming son una gran oportunidad de crear contenido que pueda ser usado para promocionar otros eventos.
Obviamente, no es lo mismo ver un vídeo promocional de un evento en nuestras redes sociales que un cartel anunciándolo. El vídeo es mucho más llamativo. Los usuarios están tan bombardeados de publicidad a diario que a menos que se trate de un formato distinto y original, terminan por ignorarlas.
En este sentido, podemos decir que el vídeo es el rey. Hay que tener en cuenta que organizar un evento supone una importante inversión económica y si nadie acude, no servirá de nada. Incluso aunque se trate del evento más especial del mundo, si nadie sabe de él, será un fracaso.
Ejemplo de vídeo promocional de un evento
Ver vídeos promocionales
Cómo hacer un vídeo promocional de un evento: Algunos consejos
En un vídeo podemos condensar toda la información de un evento, mostrar sus atractivos y todo lo que queremos contar en pocos segundos. Además, nos permite añadir imágenes y fragmentos de vídeos de ediciones anteriores o testimonios que hayamos grabado. Pero si andas un poco perdido, a continuación te damos algunos consejos sobre cómo hacer un vídeo promocional de un evento.
1. Antes del evento
Podemos usar el vídeo promocional incluso antes de que el evento se celebre para generar mayor expectación en los asistentes ya confirmados, convencer a aquellos que todavía no lo tienen claro y aumentar la visibilidad del mismo gracias a su poder viral. En este sentido, podemos encontrar distintos tipos:
- Save the date: un formato pensado para anunciar la fecha del evento. Visual, breve y dinámico. Se puede terminar con una llamada a la acción, incitando a la audiencia a pedir información, suscribirse a la newsletter, a comprar las entradas o seguirte en redes sociales.
- Bumpers: ideales para lanzar un mensaje muy directo que resulte fácil de recordar. No suelen superar los 20 segundos, por lo que son perfectos para difundir en redes sociales donde la atención suele ser menor.
- Teaser: son muy útiles para resumir la programación y los atractivos de evento, e interactuar con los clientes, ayudando a llamar la atención y a generar anticipación. Ideal para reflejar la esencia del evento.
2. Durante el evento
Uno de los principales objetivos de hacer un vídeo promocional de un evento es que la gente hable de él, tanto en persona como en Internet. Crear contenido de este tipo mientras tiene lugar el evento, nos permite elaborar una narración transmedia y generar espacios de conversación en la red, haciendo que la experiencia del usuario sea más positiva y aumentando la notoriedad de la marca. Pueden ser vídeos en streaming o vídeos para acompañar las presentaciones.
3. Después del evento
Al finalizar un evento, las personas suelen estar inspiradas y motivadas, pero con el paso de los días, la sensación se va perdiendo y la gente se va olvidando. Los vídeos promocionales de eventos nos ayudan a prolongar este recuerdo y a conseguir que los participantes tengan presente lo que vivieron y aprendieron. Hay que tener en cuenta que, por lo general, los eventos suelen conllevar una importante inversión económica. Registrarlos en vídeo no solamente nos proporciona un archivo documental, sino que además nos ayuda a mejorar el retorno de la inversión y a aumentar el alcance del evento, sin límites temporales ni geográficos.