Vídeo marketing emocional: a todos nos encanta pasar horas viendo vídeos divertidos, vídeos tutoriales para aprender a hacer cosas o vídeoblogs de nuestros influencers favoritos. La cuestión es que este tipo de vídeos no son una mera herramienta de entretenimiento, sino que pueden convertirse en un poderoso aliado para crear estrategias de vídeo marketing emocional para las campañas publicitarias de nuestra empresa.
Una estrategia de vídeo marketing emocional es una campaña publicitaria que tiene por objetivo captar la atención de la audiencia y de transmitir un mensaje de una manera distinta a los vídeos convencionales. Y es que en ellos la imagen de la marca o del producto queda en un segundo plano en pos de evocar un sentimiento en el espectador, siendo este el principal impulsor de la compra.
En lugar de bombardear al consumidor con publicidad plana, lo que buscamos es venderle soluciones, sensaciones y emociones que no encuentran en la competencia. Y es que las emociones enganchan, las sensaciones crean una dependencia hacia la marca y los sentimientos enamoran.
Ejemplo de vídeo marketing emocional
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Ventajas del vídeo marketing emocional
Las emociones son una pieza clave en las campañas de vídeo marketing más exitosas. Seguro que no te resulta nada complicado recordar alguno anuncio sencillamente por las sensaciones que te produjo la primera vez que lo viste. La finalidad del vídeo marketing emocional es conseguir que nuestro producto o servicio sea lo más humano posible.
Este tipo de vídeos generan un mayor impacto en nuestro público objetivo y hace que interactúen más con él, lo que ayuda a mejorar la imagen que tienen de nuestra empresa y a que nuestras campañas sean recordadas en el futuro. Y es que la publicidad que va directa al corazón es mucho más eficaz que la que va al bolsillo. Las emociones provocan un estado que agudiza nuestros sentidos, por lo que prestamos más atención y nos enganchamos a la información que se nos transmite.
De esta forma, centrándonos en el sentimiento y alejándonos del modelo publicitario agresivo, logramos que nuestras campañas publicitarias no pasen desapercibidas y que no sean rechazados por el potencial cliente. Porque conseguimos que los usuarios se identifiquen con nuestra marca a través del mensaje que transmitimos, siempre más profundo y sutil.
¿Cómo aplicar el vídeo marketing emocional a tu empresa?
En los últimos tiempos, son muchas las empresas las que han apostado por estrategias de vídeo marketing emocional. Porque han constatado la eficacia de las emociones y los sentimientos. Y es que, dentro de nuestra estrategia de marketing, el marketing emocional puede ser el punto diferenciador con respecto a nuestra competencia.
Una buena campaña puede llegar a tener un gran éxito en las redes sociales y para ello no siempre es necesario contar con un presupuesto elevado, sino con una buena idea y saber desarrollarla con la dosis adecuada de sensibilidad.
La cuestión es que conectar a nivel emocional con los consumidores no es tarea sencilla. Para ello, es fundamental planificar una estrategia que tenga en cuenta la inteligencia emocional y que ofrezca una experiencia con valor añadido con la que los consumidores se sientan identificados.
1. Estudia las necesidades y deseos de nuestro público objetivo
Suele decirse que la información es poder. Por eso, mientras más información tengas de tus potenciales clientes y de la imagen que tienen de tu marca, mejor será la relación que podrás tener con ellos.
2. Reflexiona sobre cómo conectar con los consumidores
Una vez que tengas claros cuáles son los deseos y necesidades de tu público objetivo, podrás planificar tu estrategia teniendo en cuenta la personalidad, misión, visión y valores de la marca y pensar en cómo conectar con ellos sin perjudicar la imagen que tienen de ti.
3. No pierdas de vista la personalidad de la marca ni las emociones de tu público
El 95% de las compras que realizamos vienen impulsadas por nuestras emociones. Por eso, a la hora de diseñar campañas de vídeo marketing emocional debes tener en cuenta que los productos cubren necesidades y las experiencias satisfacen deseos. Por esta razón, nuestra estrategia debe ser llamativa, generar emociones y transmitir confianza.